En este caso, sólo hablamos de SEO on page y partimos más o menos de cero porque la web en cuestión no tenía más que dos o tres keywords obvias.
Primero podemos analizar las tendencias de búsqueda, todas las palabras o frases relacionadas al sector que pueden estar siendo utilizadas. Con Google Insight for Search y el propio Adwords (aunque no vayamos a lanzar una campaña) podemos establecer una lista bastante amplia de posibilidades (las que suponíamos, otras que intuíamos y unas cuantas sorpresas) y ver el volumen de búsquedas mensuales y la competencia que hay para cada una de ellas.
A partir de aquí definimos una lista que cuadra la marca con las enésimas posibilidades de búsqueda. Luego hacemos lo mismo con los aspectos 'colaterales' a la marca (lugar geográfico, actividades recreativas a las que está vinculada, etc). Establecemos la lista definitiva y optimizamos la web con ella (keywords, descripciones, títulos, textos, enlaces, url...) En este caso, nos enfocamos en aquellas keywords con mejor balance entre volumen de búsquedas/competencia.
Medir los resultados
Antes de la optimización, el tráfico proveniente de buscadores se reducía a Google y prácticamente a tráfico de marca. Es decir que el tráfico nuevo captado era insignificante.
Dejamos a Google Analytics hacer su trabajo. En el primer mes, el tráfico orgánico proviene ahora de 4 buscadores: Google, Yahoo, Bing y Terra, y el volumen general de visitas orgánicas aumentó un 20%.
Las visitas orgánicas de las nuevas keywords y quitando el tráfico de marca representan ahora el 7%.
Aislamos estas visitas para analizar su comportamiento. De alguna manera nos servirá para saber la pertinencia del nuevo tráfico captado. Y lo comparamos con el tráfico Referido, el de mayor calidad en esta web.
Los resultados son mejorables, pero es un buen comienzo para un segmento de visitas que antes representaban prácticamente cero.
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